Heme Aqui

SOY aunque a veces no lo parezca, ESTOY aunque que a veces paso desapercibida y VOY en el camino correcto aunque aún no sé a donde quiero llegar.

viernes, 26 de noviembre de 2010

¿Cómo hacerte saber que siempre hay tiempo?


¿Cómo hacerte saber que siempre hay tiempo?
Que uno tiene que buscarlo y dárselo. Que nadie establece normas, salvo la vida.
Que la vida sin ciertas normas pierde formas. Que la forma no se pierde con abrirnos.
Que abrirnos no es amar indiscriminadamente. Que no está prohibido amar.
Que también se puede odiar. Que el odio y el amor son afectos.
Que la agresión porque sí, hiere mucho. Que las heridas se cierran.
Que las puertas no deben cerrarse. Que la mayor puerta es el afecto.
Que los afectos, nos definen. Que definirse no es remar contra la corriente.
Que no cuanto más fuerte se hace el trazo, más se dibuja.
Que buscar un equilibrio no implica ser tibio. Que negar palabras, es abrir distancias.
Que encontrarse es muy hermoso. Que el sexo forma parte de lo hermoso de la vida.
Que la vida parte del sexo. Que el por qué de los niños, tiene su por qué.
Que querer saber de alguien, no es sólo curiosidad.
Que querer saber todo de todos, es curiosidad mal sana.
Que nunca está demás agradecer. Que autodeterminación no es hacer las cosas solo.
Que nadie quiere estar solo. Que para no estar solo hay que dar.
Que para dar, debemos recibir antes. Que para que nos den también hay que saber pedir.
Que saber pedir no es regalarse. Que regalarse en definitiva es no quererse.
Que para que nos quieran debemos demostrar qué somos. Que para que alguien sea, hay que ayudarlo.
Que ayudar es poder alentar y apoyar. Que adular no es apoyar.
Que adular es tan pernicioso como dar vuelta la cara.
Que las cosas cara a cara son honestas. Que nadie es honesto porque no robe.
Que cuando no hay placer en las cosas no se está viviendo.
Que para sentir la vida hay que olvidarse que existe la muerte.
Que se puede estar muerto en vida.  Que se siente con el cuerpo y la mente.
Que con los oídos se escucha. Que cuesta ser sensible y no herirse.
Que herirse no es desangrarse. Que para no ser heridos levantamos muros.
Que sería mejor construir puentes. Que sobre ellos se van a la otra orilla y nadie vuelve.
Que volver no implica retroceder. Que retroceder también puede ser avanzar.
Que no por mucho avanzar se amanece más cerca del sol.

martes, 9 de noviembre de 2010

A la orilla de la chimenea


Puedo ponerme cursi y decir
que tus labios me saben igual que los labios
que beso en mis sueños,
puedo ponerme triste y decir
que me basta con ser tu enemigo, tu todo,
tu esclavo, tu fiebre, tu dueño.
Y si quieres tambien
puedo ser tu estacion y tu tren,
tu mal y tu bien,
tu pan y tu vino,
tu pecado, tu dios, tu asesino…
O tal vez esa sombra
que se tumba a tu lado en la alfombra
a la orilla de la chimenea
a esperar que suba la marea.
Puedo ponerme humilde y decir
que no soy el mejor
que me falta valor para atarte a mi cama,
puedo ponerme digno y decir
“toma mi direccion cuando te hartes de amores
baratos de un rato… me llamas”.
Y si quieres tambien
puedo ser tu trapecio y tu red,
tu adios y tu “ven”,
tu manta y tu frio,
tu resaca, tu lunes, tu hastio…
O tal vez ese viento
que te arranca del aburrimiento
y te deja abrazada a una duda,
en mitad de la calle y desnuda.
Y si quieres tambien
puedo ser tu abogado y tu juez,
tu miedo y tu fe
tu noche y tu dia.
Tu rencor, tu por que, tu agonia…
o tal vez esa sombra
que se tumba a tu lado en la alfombra
a la orilla de la chimenea
a esperar que suba la marea.

Joaquin Sabina